ocupación

en la radio suenan los smooth eighties y todavía no son ni las ocho y media. está ordenado, relativamente ordenado como los espacios que no tienen casi personas en su interior de espacio. los objetos se habrían quedado solos durante todo el fin de semana y se ve que ordenaron bien el kilombo de la fiesta que hicieron, porque parecen desinteresados de aparentar lo contrario.
¿para qué perder el tiempo trasladándose a la supuesta vida de otros?¿ no es acaso suficiente lo que yace frente a nuestras narices?
yo diría que para decir que me place lo que acontece directamente frente a mis ojos en el panorama laboral, aún debo recorrer un largo trecho hasta llegar al techo de la potencialidad desarrollada. por el momento estoy menos distraída, y con menos tiempo que perder. ¿pero qué interesa de describir los acontecimientos ficcionales de la realidad de un anónimo? ¿qué?

Pues es la vocación docente, que viene por el lado de sagitario, la que tiene relación con el amor por la verdad y la transmisión de algún tipo de moraleja o enseñanza de vida. o mejor dicho, un aprendizaje de la experiencia de un niño recién despierto. Esto quiere decir que si encuentran a menudo la insistencia del extracto de verdad empírica o si queréis también, la fuga del dolor a través de la filosofía; es una sana salida de nuestra querida luna centauro.
a la vocación docente se le agrega un fuerte contenido de necesidad espiritual, pues bien, la docencia está ligada de alguna manera a alumbrar las neuronas. como dijo alguna vez jesus christ, conoce la verdad y libre te hará. alumbrar las zonas de ignorancia nos hace seres cada vez más íntegros.
esto de desglosar los motivos analíticamente es una cualidad virginiana o mercurial. ¿qué sucede en los intestinos? pues el alimento debe recorrer un largo trecho para ser descompuesto en aquello que es necesario, útil, y aquello que no lo es. qué se hace con un material en bruto, pues se pule, se purifica, se descompone. se analiza. el virginiano es un sufrido ser que no se permite fluir pues su razón está allí para inhibirlo en tanto la alegría no tiene cabida en la pregunta por la utilidad o necesariedad. el pobrecillo del virginiano es victimario de sí mismo. esa energía que no abunda, siempre hay que ahorrarla por las dudas que se acabe. bueno, pues es cierto que el toque de prudencia y de humildad lo convierten en un ser querido, pero su gran pecado es la avaricia y la envidia porque su característica es aquella de la escasez de si mismo. servicial por no decir masoquista, el virginiano prefiere el segundo plano qué es más cómodo que ofrecer su seducción por ser quien es. él se hace querido en tanto es útil para el otro, no en tanto ofrezca su belleza o chispazo de bondad. esto de ofrecerse a sí mismo, lo pone incómodo si el fin no es pragmático. no puede expresar su vulnerabilidad, la de todo el mundo, que es esa necesidad de pedir afecto del otro, al fin de cuentas todos queremos que nos quieran, ¿o no? cada uno de nosotros buscará sus trayectos para conseguirlo, siendo imitar los caminos ya conocidos o inventarnos algunos nuevos.
el tema escorpiano o plutoniano de los celos lo encontramos hundido en el fondo del redondel en su punto más bajo, en la oscuridad inconsciente. la intensidad es una necesidad de llegar al fondo de las cosas, a sus profundidades también. el escorpiano siempre desconfía de las buenas intenciones. el vé más allá de lo aparente, a veces también ve más fantasmas de los que existen, pero es su necesidad de penetrar lo que lo hace muchas veces tan denso de tolerar, a no ser que se encuentre con algún otro intenso que lo entienda y valore su profundo sentir. lo oculto, lo desconocido y esa necesidad de posesión y de control de todo. el anhelo del poder sobre el otro a todo nivel de relación. y sin embargo, la entrega y la radical transformación de los cimientos. su fuerza es tan intensa que no teme la destrucción, pues es la otra cara de la moneda de la creación.
no hay mucha más complejidad en el tema. le podemos agregar la cualidad pisciana neptuniana de los océanos inmensos en donde se refleja el cielo. ¿o acaso en su reflejo no se funden y confunden en el mar las identidades de los que se ahogan en una marea de ilusión?
el amor, claro. el amor es algo que devuelve y devela. devora y desvela en su costado tanático. el amor por la verdad, el amor por el arte, el amor por los seres humanos, el altruismo y la compasión. el desequi-libra. el amor por las ideas, el amor por la comunicación y por las fuentes de expresión. el amor aéreo. el amor racional que deja de lado los instintos. eso hace a la cuestión de no conectarse con las emociones o que la emociones sean un problema que la mente, por más que se devane todos los sesos, no llegue a encontrar el punto de negociación corporal en la manifestación de la emoción. aquella racionalización objetiva de todo sentimiento o sensación pasada por alto que luego hace estragos en la práctica próxima. las personas más sanas son aquellas que pueden expresar sus sentimientos cercanos sin tanta vuelta de tuerca. es que libra teme que la verdad lo desequilibre. teme quedar mal con el otro, teme que la diplomacia no pueda ser aplicada porque en consideración siempre está el otro, qué dirá el otro, qué pensará el otro, que quiere el otro. el gran otro y el pequeñin del otro. el otro y su relación sadomasoquista consigo mismo. o me someto o me someten o someto y se someten. otra vez, vino el poder plutón a hincar su tridente volcánico.
por eso, en este arduo camino del autoconocimiento, en donde nos vamos convirtiendo en científicos de nuestra propia psique y entendedores de la psique del otro por propiedad transitiva, debemos encontrar el veneno y su antídoto. el qué hacer con aquello que somos. y si aquello que somos tiene alguna vertiente de cambio o trasmutación de aquello que nos hace padecer, busquemos caminos que nos hagan padecer un poco menos. ¿dónde sino en el arte y en la ciencia podemos encontrar una sublimación adecuada para exorcizar en el intento aquellos demonios de plutonio que nos hablan en lenguas desconocidas? ¿cómo sino a través de nuestra herramienta corporal capaz de materializar aquello que soñamos despiertos y dormidos?