mutis

(lucero en lo de los pescadores, de la noche de los santos inocentes)


luceros, pájaros, mares.
noches, sonrisas, guiños.
días, arenas, vientos.

colectivos, horarios, teléfonos.

amigos, charlas, mates, músicas.
humanos, ideas, proyectos.

caricias, abrazos, besos.



"Aceptalo, no estamos para eso, nos falta el valor" (babas...)

Who knows...?!
Callar o hablar de más, vendría a ser lo mismo, en su dosis contraria. Como ya estamos un poco más grandes, aprendimos a moderarnos. Sin embargo, ella tiene una máscara, una burbuja de cristal, o mejor dicho, una malla de armadura, que se tensa y no deja traspasar la emoción completa. Quizás tema estallar, por eso se contiene. Con el tiempo pretendo martillarla lo suficiente para que deje traspasar el límite en libertad. Con el tiempo esa energía empeñada en el control absoluto, será abolida. Como lo fue en su momento la esclavitud. Quizás esa energía liberada comience a fluir para crear y así abandonará los espejos del ego, en los que le gusta mirarme a menudo. Escrachando a la bruja es la única manera de dejarla en evidencia. Eso para que no se oculte, porque a ella le gusta ocultarse tras la vanidad, como la bruja de Blanca Nieves, o como la Reina de Alicia. Una vez que está en evidencia, aprenderé a reconocer porqué es que tiene esa manía de interrumpir los buenos momentos. Yo creo que debe ser miedo, pero esta palabra es tan amplia que no me cabe. Miedo a qué cuernos... =) Recorcholis! A esta altura la lista de miedo es interminable. Miedo a los cuernos de su propia frialdad. Parece que la bruja es bruja, porque no se acepta como tal. Entonces esto la pone peor. Ella se alimentó de resentimiento y de envidia, de maltratos y sojuzgamiento. Ella, se cree que es la peor de todas, pero porque no puede ser la mejor. O porque como decía antes, dosis contraria del mismo veneno. Ella se desquita con otra, una que por inocencia insolente le da a su bronca. La otra es la que está cautiva, porque no lo sabe. A dónde conduce esta futura catfight? En algún momento la bruja debe morir, explotar en brujitud para alimentar a futuras flores de su vanidad venenosa. Esto implica, redimirse en partículas que generen belleza esparcida, sin egoísmos brujeriles. Dar de si. Allí entonces es cuando la otra debe seguir su camino, separse de la bruja, divorciarse si es necesario, buscando aquello que busca en el mundo, que aún no lo sabe, pero lo busca, eso sí lo sabe. tal vez lleve alguna flor consigo que le recuerde aquello que es cuando uno es niño, pero también la historia no se trata de buenos y malos, sino de que nos alimentemos no de venenos, sino de aconteceres. de flores si quereis... alimentarse de nutrir.