sábado, 27 de octubre de 2007

así se hace la paz

Estos últimos días nostalgia y melancolía se han entrevisto, merodeando los rincones de las sombras. Pensé que eran esos síntomas tan femeninos de ese femenino momento del mes, y no me equivoqué tanto...Pero encontré un plus. Ese plus que es necesario de atravesar. Por mejores e inolvidables buenas compañías que he tenido -entre nos- a solas no perduran en comparación con esa historia recientemente finalizada que me transformó la vida. No será fácil que me pueda volver a enamorar. Lo sé. Pero resulta que es la primera vez que lo planteo en estos términos como un anhelo de volver a... Antes ni me lo planteaba, antes pensaba que esto era imposible, porque yo sólo me veía con él hasta el final de mis días. Y por esa intensidad nunca antes sentida, también tenía las esperanzas de hacerlo funcionar, y de hecho eso fue lo que intentamos de una y mil maneras posibles. Hasta que nos dimos cuenta de lo que sucedía en verdad. Eso que muchas veces sabemos con antelación, pero no podemos admitir. Hoy releo el último email que nos escribimos, y está muy claro que tanto él como yo estamos mejor así de distancia.
Necesito darme un espacio de respiro para despedirme, para sellar lo cerrado, para olvidarme de lo peor y sólo conservar lo mejor que hemos compartido en la memoria. Eso mejor que queda no es excusa para volver, ni modos. Eso resulta imposible hoy, y está lejísimos de mis deseos y de los suyos. Eso es el mejor modo de liberarse de la mochila para seguir adelante. Por eso necesito este tiempo para hacer la paz a solas, aunque me tome mis licencias de pasar buenos momentos en buena compañía.
Admito que no lo odio. Admito que lo extraño. Admito que ya no lo amo. Admito que quisiera que fuera indiferente para mi, pero me falta tiempo para eso. En eso confío. Admito que en función de lo que viví en los campos del amor, todavía me falta mucho por aprender de siembras y cosechas. Pero que todas las relaciones amorosas me han transformado profundamente, me han hecho crecer. Yo siento que sé que para mejor. Quizás me queden algunas lágrimas aún por llorar. Pero cada vez dan paso a mas sonrisas, risas y carcajadas. Y paz mental. Y paz espiritual. A mucha gente de mi entorno le cuesta creer lo que me sucede. Yo ya no explico más nada. Cada uno sabrá. Cada uno lo habrá vivido alguna vez. Cada uno tiene sus tiempos de decantación, de encantamiento, de estancamiento y de desencadenamiento también. Ahora me siento libre. Y sin apuros. Y sin ansiedades. Y sin búsquedas. Y tal vez así sucedan los encuentros. Ya no controlo más nada. No puedo y no quiero.

viernes, 26 de octubre de 2007

lost in translation

Sigo con la racha Nina. Nina Simone, Nina Hagen, Nina Tango. Y Nina ya no es más una niña. Y yo me permito ensayar una sarta de nosensatez en lo que tenga "ganas" de escribir. "Si no quiere perder el tiempo, no siga leyendo". Capaz que esto funcione en reversa, y yo ya le puse cuarta. Y voy por más. Como dije, y digo y a veces me cansa decir siempre las mismas palabras de esta misma sujeta, sujetada a su existencia con este vehículo que me ha tocado en suerte, azar y ciencia. Quizás también amor, el que hizo que yo naciera de dos seres que se encontraron alguna vez. No sé si les habrá pasado una o mil veces, ¿pero es que acaso no se cansan de ser quiénes son? Yo a veces me doy cuenta y también me "canso". Estoy pensando en la posibilidad de que alguna vez se me canse también de escribir las mismas palabras y decida no hacerlo más, y dedicarme a otra cosa. En todo caso, "nada se pierde y todo se transforma" y también ese resto que no se puede clasificar, se pierda. Y la verdad es que no me interesa demasiado analizarlo más que esto. En todo caso retornaré con nostalgia a leerlo y quizás también me canse la nostalgia y ya no tema perder nada.
El jazz resulta oportuno ahora, porque en su improvisación me dejo perder y no encontrarme jamás. Y ser sólo notas musicales combinadas. Como las palabras pueden serlo también. Y salir a volar, con paracaídas? o para remontarla? Como un barrilete, como un avión, como un sonido, como la lluvia, como un clarinete caprichoso. O como la luna que se ve desde mi ventana, un poco empañada, la luna, no la ventana. Con coronita, o con velo y llena. Como una pelota llena de luz lunar. ¡Hoy ví unos relámpagos impresionantes! Se sucedían como cuadros con flashes de una película, aparecían y desaparecían. Los rayos eléctricos se veían preciosos, y esa luz blanca enceguecedora y tan poderosa. Me imaginé que era sobre el río de la Plata, o tal vez eran tan plateados que podrían perfectamente ser de las costas del Este. No lo sé. Desde la ventana del dpto, sólo se veían las luces, más su sonido no llegó jamás a mis oídos. La mejor película natural en vivo que he visto, muda y simple, pero impresionante, e inolvidable. Y tan imponente como todo fenómeno natural de esta Madre Tierra, en anteojos de ciudad. Extraño la naturaleza próxima del jardín de mi casa. Extraño levantarme a la mañana el fin de semana y picar para el jardín descalza, haciendole morisquetas y voces extrañas a mis perras. Parece una imagen de publicidad comercial, lástima que la propaganda haya vaciado nuestras vidas para ponerlas en venta en el mostrador de las imágenes de felicidad en frasquito. Pero fueron vivencias reales, de mi vida real. Y la melancolía de esta noche, será quizás la anticipación de la tormenta? Adoro las tormentas, y si son de noche, mucho mejor. Aquí siento el viento enloquecido que sopla las cenizas, y las puertas hacen ruidos de golpes de viento previo a la tormenta. La luna subió, y ya se sacó el vestido de novia viuda. Me mira, la miro. Hacemos un pacto. Vos allá y yo acá. No me jodás, te miro desde lejos. Hoy vas a entrar en mi pasado, una vez más, que ya has entrado, y ya has sido enterrado. De naturaleza sale cada tanto esa oscuridad extremista. Tal vez no tenga ni idea de lo que estoy diciendo, pero ese tango es precioso. Y si estaríamos mareados, capaz raros y encendidos. Amar, sufrir, partir y después andar sin pensamientos. Toda una declaración de principios y finales contundentes. Y me fui por un rato a comer una fugazzetta con mucha cebolla y rellena, como a mi gusto de sabores fuertes, con una cerveza con mucho sabor a malta, y en la tele se sucedían esa sarta de sartenes con huevos fritos y todo, creo que me manché con grasa, quizás chorreaba de Tinelli y de los gatos de Sofovich, nuestro hugh heffner tercermundista, capitalista y esclavizador psicopático de mujeres perdidas con implantes en todos lados, menos allá abajo y acá arriba, muñecas vestidas para ofrecer un agujero a quien la quiera poner primero con dólares lavados del narcotráfico argentino, de la blanca, blanca noche capitalina. Chan Chan y Chin Chin! Brindaba Nenem desde Anillaco con un anillo de oro, y un diente de platino, que le regaló López Rega cuando regaba el desierto con magia negra del peronismo argentino. Ese regalo no le fue gratis, fue un obsequio porque el innombrable sumaba adeptos a su cartera de clientes, por las almas que había recolectado de aquellos que la habían vendido barato, barato. Descuidando a sus descendientes. Que me he puesto rabiosa y malévola con mis juicios. Aquí ya, suficiente. Si me mordiera la lengua, capaz que me envenenaría con mis propias palabras. Hay que saber cuando decir basta y hacer silencio, porque las palabras crean realidades. Cautela, querida, cautela ante todo. No juzgueís como no os gustaría que os juzgueis otros. Misericordia, yo no olvido que también existe esa palabra. Lástima que con ella se puede formar también la palabra miseria y discordia. ¿Acuerda? Da cuerda con al acordeón.
Ahora, Sur, en Sol de tango, en Do porteño. Y esa canción hila dos recuerdos dos en la voz de Caetano Veloso. Uno en Bella Vista, armando la mudanza, contemplando el jardín, en soledad. Otro en una cama ajena, y dos gotas de lágrimas, salaban mis labios. Y una sonrisa, y un lunar, y dos cabezas con rulos y un abrazo. Y el sol de la ventana, y el sahumerio de la sala. Te quiero, Sur. Hoy no vuelvo, Sur. ¿Sur o no-Sur?
Dilemas, Dile más. Dile no. Dile si. Mejor no le digas nada. Sólo espera. Es manzana. Es banana. Es ananá. No eres la nana de nadie. Ni eres Nina. Sólo disfrutas de escucharla, de vez en cuando. De cuando en vez, esperabas algo que sabés no puedes esperar. Sólo madura. Y guíate por aquello que sabés que ves que es. Que no lo podrás cambiar. Que no lo intentarás esta vez. Ya lo has hecho, lo has creído, y no te fue bien así. Ahora con el recuerdo que dejan las cicatrices, por allí no has de volver a pasar. Tal vez lo mires desde lejos, y con cariño, por aquellos encuentros que has sabido disfrutar con limitaciones y todo. Pero por ahí no. Espero que esta advertencia te sirva de algo más que para, díscola, probar de alterar. El pez por la boca muere y cuando nada se escurre. No lo intentes atrapar. Las redes no son de tu propiedad, ni tu propósito. Es mejor saber hacer la plancha pero también saber nadar.
It´s good to know when to say good bye, and good luck.

jueves, 25 de octubre de 2007

who knows where time goes?

Gracias a Vika, mi hermana menor, conocí a Nina Simone. Gracias a ella y a Fernando Peña. Pero gracias a la casualidad, reconocí una canción de ella que me caló el alma. Fue amor a primera escucha, esa mañana al regreso de Laprida. En honor a ese encuentro el título de esta entrada. Imperdible. Y si están sensibles, tal vez se cuelen alguna que otra lágrima piantada y una sonrisa de entendimiento y de aceptación. To move on and to stand still. With courage, my friends. And yet joy: que lo mejor está aún por llegar.

WHO KNOWS WHERE THE TIME GOES - NINA SIMONE (grabado en vivo)


Across the morning sky,
All the bird are leaving, http://www.youtube.com/watch?v=OXeh742_jak
Ah, how can they know it's time for them to go?
Before the winter fire,
We'll still be dreaming.
I do not count the time

Who knows where the time goes?
Who knows where the time goes?

Sad deserted shore,
Your fickle friends are leaving,
Ah, but then you know it's time for them to go,
But I will still be here,
I have no thought of leaving.
I do not count the time

Who knows where the time goes?
Who knows where the time goes?

And I'm not alone,
While my love is near me,
And I know,it will be so,till it's time to go,
So come the storms of winter ,
and then the birds in spring again.
I do not fear the time

Who knows how my love grows?
Who knows where the time goes?

La la la la la la......
Um um um um ........
Du du du du du.........
Ah ah ah ah ah......
Um um um um.......

Ella dice, al comienzo de la grabación, "en algunas ocasiones de la vida tendrán la oportunidad de preguntarse qué es eso que llamamos TIEMPO". Y yo agrego, y de ensayar respuestas, las que tengamos para darnos en esos momentos.
Hoy jueves, enfrente de la ventana que da al cielo que atraviesa nubes de grises distintos y lluvia y música, me detengo por un rato, me siento sentar, en calma. La canción ya termina y se va con una apuesta distinta de alegría y esperanza y sentimientos entrelazados en diversas notas. Sigue el camino. Sigo. Camino. Ayer ha cerrado una herida que tuve durante tanto tiempo como el que me tomó aprender a caminar en mis propios pies. Celebro la curación. Bendita sea por siempre y en manos de luzazul me entrego a ese destino del que escapé durante tanto tiempo. Gracias por la vida que me han dado. Ahora es luz plena; brilla a través de mis ojos que puedan ver mi corazón latir.

martes, 23 de octubre de 2007

sedimentar


sedimento verborrágico

sedimento sustantivo

condimento adjetivante

subjetividad articulada


Les presento una de las fotos que más me gustan de las que tomamos de Laprida. Aquí estábamos un sábado por la tarde en El Paraíso, tirados en el pasto, frente a la laguna, contemplando, "esperando"que se hiciera el momento de irnos en el micro para el pueblo a nuestros respectivos talleres. Se sentía muy bien. Aún siento la influencia actuante de esa experiencia. Aún seguirá sedimentando la energía de la que fuimos parte y acto.
Ahora, volviendo a Bs. As. más específicamente a mi casa, comenzaron a pintar algunas de las superficies. Se siente un leve olor a pintura, que seguro todos podrán citar de sus recuerdos/olores. Ya se me aquietó un poco el ralle de ayer. Sólo que me preocupé, me enojé, me ocupé y finalmente le encontramos solución entre todos. Pero es siempre necesario el planteo y resulta sumatoria la solución. Estos días que vienen no voy a estar en casa. Me cuesta en parte porque hace demasiado tiempo ya que estoy siempre "de paso" en los lugares en los que habito, de mudanza en mudanza. Y por otro lado se le suma que en pocos días rindo uno de los parciales que me restan del cuatrimestre y entrego un TP de los últimos que tengo que entregar de este cuatrimestre, entonces de algún modo esto viene a "complicar" la concentración que necesito para hacer bien mi trabajo, y para leer bien mis apuntes. Pero de alguna manera, hace de antídoto para las rutinas establecidas y cataliza otras perspectivas. Hoy puedo ver el lado positivo de la cuestión. Ayer me costó un perú y terminé el día demasiado cansada, demasiado callada.
Ustedes sabrán, diferentes ambientes despiertan diferentes cuestiones. Como Laprida despertó energía. Como Apolinario despertó abandono. Luego viene lo que queda de esa internalización sedimentada. Pero no estática, sino productora de futuros movimientos. En un caso dirección y propósito, en otro caso, crecimiento. La casa está en orden. Felices Primaveras.

lunes, 22 de octubre de 2007

ánimos combativos

La mañana me encontró molesta, incómoda por la llegada de los pintores, por la improvisación y el apuro de siempre, por aquellas cosas padecidas mucho tiempo y que ahora ya no van más. Estamos más grandes, vio? Y estamos en plena revolución también. Quizás por momentos los arranques de bronca pareceden desmedidos lo que supone un gran tiempo de atrasado inexpresado anterior. Ahora salen como pus, como ya dije, de las heridas nacerán los gérmenes del cambio. Claro, mi nivel de energía está en alta, increscendo, la buena onda también, y la expresión de las pasiones iracundas también. Perdón por la brusquedad, pero no la puedo controlar como lo hacía antes. Y en algún punto sé que es mejor que así sea, aunque molesten más de la cuenta. También expresan evolución. Ya vendrá a reestablecer el equilibrio moderado, para volver a cambiar nuevamente.
Hoy es el día de abrir una carta que me escribí hace un año atrás, dirigida a leerla para entender mejor desde dónde me situaba y dónde me comienzo a situar. No la voy a transcribir aquí, pero sólo diré que me alegra haber crecido tanto en tantos aspectos, en un sólo año. Los balances de fin de año se acercan y yo no seré una excepción a la regla. Algunos años resultaban livianitos, detenidos, otros desde hace unos años, años de comienzo del "proceso", se han intensificado por todo lo que implicaron de vivencias que antes no asomaban a mis ojos dormidos. Y puedo decir que comencé a vivir la vida recién hace un tiempo atrás. Y ya blablablé varias veces de esto, y seguiré blablableando hasta que agote lo que quiero hacer de este espacio transformador. Quizás en un año ya no me interese tanto escribir aquí, pero por ahora resulta funcional a lo que necesito decir que no dije durante mucho mucho mucho tiempo.
Es lunes, decantación blanca de los balances caqui de una semana intensa en púrpura (fin de semana anaranjado incluído) ¿Y que pasó? Pues venir de Laprida me tomó unos cuantos días de adaptación horaria y desordenada. Entre todo lo que viví y todo lo que continuaba en plan de agenda, pues recién el viernes me levanté con ánimos de ordenar y organizar el cáos. Lo dejé ser durante unos días, pues no tenía otra forma de transcurrir lo escurridizo de esta vivencia. A mediados de semana se produjo un encuentro con alguien del pasado, al cual me hizo muy bien reencontrar. Creo y espero que a el nombre en cuestión también. Se trataba de hablar de lo que no se había hablado y de entender lo que no se había entendido para poder simbolizar y seguir adelante. Me alegro que haya sido así, pues en sus palabras hallé fuerzas para concluir algo que no había finalizado del todo, de otro aspecto directamente relacionado con esto, en lo que implica corregir actitudes con la esperanza del tiempo presente, que en el tiempo pasado hubo significado algún yerre del cual me hago cargo, pero no puedo borrar del hilo acontecial. Pues ya sabemos, nada se puede hacer con el pasado desde el pasado, sí con el futuro desde el presente. En lo que significa el espiral ascendente de evolución. No es un círculo, pues implica movimiento de transformación en cada repetición, que nunca es igual a la anterior y que sólo salta en cualidad cuando le damos respuesta certera de cambio interno.
Fue aprehender aquello que me había pasado desapercibido para comprender elecciones presentes, para cerrar elecciones pasadas. Lo que encontré allí, más allá de una respuesta de vicio inevitable, donde no encontré más que más de lo mismo de siempre y de lo mismo que ya no quiero más cerca de mi vida, de mi existencia próxima. Mas allá de respuestas enredadas que aún no logro que resulten en indiferencia sustitutiva, fue lo que significó para mi cerrar con palabras escritas. Y echar un poco de fly. Eso me provocó un poco los ánimos, me caldeó el espíritu, pero si realmente quiero algo distinto de mi vida, soy conciente de que puedo hacerle frente y costado a aquello que no pude antes. ("todo vuelve a mi una vez más")
Ese acto de modificación simbólica produjo una serie de movimientos, que también estuvieron acompañados por otros ingredientes que protegen e influencian con positrones positivos esta transmutación interna. Y si. No estoy sola en esto. Y no me modifica a mi solamente, sino a todo mi círculo de influencia. Si te corrés un poquito, por más imperceptible que parezca, en proyección la diferencia se trasnforma en abismal. Acaso algo habrán escuchado del Efecto Mariposa. Sé que si yo cambio, también cambian ustedes. Y multiversa. Por eso esto de vivir en humanidad implica una gran responsabilidad de bienestar, para no ejercer influencias negativas en la red total. Pero claro, en este Planeta Humano, hay de lo bueno y de lo malo, tanto como hay de nosotros mismos.
Ya barriletée lo suficiente. Ahora es momento de ajustar la puntería que me llevó de la física cuántica al efecto mariposa.
¿Y cómo siguió esto? Pues siguió moviéndose. Like a moody moovie. Facultad, taller, nota parcial otro ocho redondeado para psicoterapias y viaje culinario y musical a México con Marce, Reiki, pinturas, sueños, largas conversaciones transformadoras. Alegría. Navarro, festejo, magia y cansancio. Más gente, reencuentros, familia, jardín, juegos. Y ayer llegué a casa, luego de esta larga travesía y me quedé dormida en el sillón mientas miraba 12 monk keys. Me había dado cuenta de que necesitaba un momento a solas. Un poco de reflexión y calma. Sedimentación. Aquí de nuevo lunes, y los movimientos desencadenados siguen y siguen. Ahora habrá que "adaptarse" con la bronca atragantada de otros sucesos que si bien son positivos en su meta final, como pintar la casa lo sería, hubiera sido mejor planificar y tomar en consideración que aquí habitamos también nosotras y que en una semana rindo un parcial, y que esas cicunstancias no ayudan, más bien complican un poco la concentración que necesito, pero como lo he vivido tantas veces y como dije que se reactivaba el pasado de lo acallado aún con más fuerza, no me la como doblada, quizás tiro algunas bombas radioactivas, pero me dispongo a la cooperación. No me queda otra. Aunque esos adultos de los cuales dependí de niña, me vuelvan a mostrar lo que tanto tiempo hicieron, sólo que ahora desde la adultez, aunque con un poco de bronca y de ira, me dispongo a aceptarlos tal como son. Prefiero eso, a lucharlos. Eso implica que cada vez seré más quien soy y no una niña hija dependiente. De aquí en más podré salirme de la travesía mítica, para poder realizarme cada vez menos condicionada por el pasado de lo que fui. Y de lo que fueron conmigo. Esto implica nuevamente, elecciones amorosas más acertadas. Ya dije, que mi camino se resume en estas líneas: transformación a través del autoconocimiento a través del amor verdadero.

viernes, 19 de octubre de 2007

manito

Hoy emprendo un viaje cortito con Manu Chao por Latinoamérica, en verde, rojo, amarillo y negro. Es sol primavera, más amarillo anaranjado que blanco como el del invierno. Hoy me levanté con muchas pilas, hice varias cosas y recién pasó el medio día. No quería dejar de aparecer por aquí también para transmitir que me siento muy bien, y que transito con calma el día de hoy, y con mucha energía. Se están produciendo cambios lindos en mi naturaleza, un reencuentro con algo que se llama autenticidad. Hoy todavía me esperan muchas aventuras para el día. Esto recién comienza. Lo mejor de todo es concretar cosas, aunque sean pequeños detalles cotidianos en el día, son los que nos mantienen andando, soñando, con fé, de concretar todos nuestros proyectos, hasta aquellos que parecían sueños lejanos del soñar despierto. Esto no implica un viaje solo, sino en compañía con los que tratamos todos los días y especialmente con los que queremos, con los que conectamos y con los que compartimos, lo que sacan lo mejor de nosotros en un ida y vuelta de retroalimentación positiva. Protegerlos y también protegernos a nosotros. También sentar algunos límites, pero esos límites son indispensables para que sea la armonía. ¿demasiada buena onda? no desconfíen, que lo bueno también existe y si es así, hay que decirlo.

jueves, 18 de octubre de 2007

complemento

Ya es de día, ya dormí del desvelo. Ya comprendí un poco mejor de qué se trato el plus de energía que me conectó con el pasado para verlo con otros ojos, otras luces. Descorrer el velo. Mejor no podía ser la palabra elegida en cuestión, y fue por intuición que condensó sentido.
Sigo con las señoritas de música experimental, Coco Rosie. Y la infancia había convocado la reflexión, ahora abriendo camino, más allá de papá, más allá de mamá. También había pasado revista a aquellos enganches letales y todo comenzó también por un sueño. Soñé con un festín de carne, al que yo no quería asistir esta vez, del cual me retiraba a tiempo y con conciencia, y no estaba sola. Me acompañaban y me decían, vayámonos de acá que es un nido de ratas. Luego fue una sesión de sanación, un reencuentro del pasado a tomar helado, y la cena de cumpleaños de mi viejo. Luego fue el desvelo, luego de esa película que conecté con dos momentos claves, entrelazados por mis viejos. Y las estaciones del año de sus cumpleaños. Luego fue releer lo escrito para entender algo que se me había pasado desapercibido, luego fue leer esos emails vastos de golpes bajos, que antes no había tenido los cojones de leer. Vuelvo a confirmar y no respondo a ofensas oscuras, a tacles envidiosos y enviciados de mentiras, vuelvo a sentir qué estoy certísima en mi decisión. Y vuelvo a enojarme conmigo por haberme sometido a esa situación tanto tiempo. ¿Qué necesidad tenía de hacerme daño? ¿Por qué no me supe cuidar? ¿Por qué necesité torturarme durante tanto tiempo? ¿Qué quería comprobar? Siguen las conjeturas y cuán equivocados seguirán equivocándose. ¿Por qué tolerar tal maldito despliegue de agresión gratuita? Me cuesta entender que aquella persona que yo creía amar con toda mi alma, en este momento se haya convertido en mi peor enemigo. Y cuanto más lo veo como es, más lo desconozco. Más lejos lo quiero de mi vista, de mi vida. Sin embargo no le odio, sólo me enoja que una persona que dice haberme amado, sea tan cruel y desfachatada en sus planteos. Como si no se pudiese mirar a si mismo. Y como si con su resentimiento tuviese que echar culpas a quien lo sostuvo durante tanto tiempo. Me defiendo de lo que no me pude defender antes. Pero no odio. En algún lugar de mi corazón, entiendo quizás el dolor, la tristeza, la necesidad de explicarse lo que se entiende sin palabras. Lo que no me cabe es que su juego psicológico de manipulación destruya lo que él dice haber amado. Quizás sea como el último manotazo de ahogado, o como la fábula del escorpión que mata a su compañero de ruta, al mismo que lo ha salvado del naufragio. Para hundirse con él. Su naturaleza picona es más fuerte que el amor que lo salva. Destruye allí, donde no puede obrar. Es una cuestión de naturaleza entonces. Y la naturaleza en su esencia no puede ser modificada. Lo dejo equivocarse solo, que se haga cargo de si mismo, ya no me tiene cerca para achacar culpas. Se las tendrá que achacar a si mismo. Ojalá que pueda verse. Ojalá que se salve a si mismo. Nadie lo puede hacer por él. Sus injurias sean vueltas en su propia cara. Yo estaré a un millón de años luz.

Pearl Jam - I believe in miracles
http://www.youtube.com/watch?v=9wh6eLxX8TM
Thumbing my way
http://www.youtube.com/watch?v=6S1Rh0MQSdA

Mecano - Ay qué pesado
http://www.youtube.com/watch?v=gTfLYz7fOJ4
50 palabras, 60 palabras o cien
http://www.youtube.com/watch?v=Aput54EvyBo
No tienes nada que perder
http://www.youtube.com/watch?v=bLEl8M1p8JQ


Bjork - Joga
http://www.youtube.com/watch?v=BML2JAFUIaw
All is full of love
http://www.youtube.com/watch?v=EjAoBKagWQA

Caetano Veloso - Come as you are
http://www.youtube.com/watch?v=Nh6NlUgJoRE

des velo

Son casi las horas de levantarse. Hace mucho tiempo que no me quedaba despierta para escribir a estas horas. Estoy escuchando una música preciosa de unas señoritas que hacen música experimental casi de oídos de niños, con sonidos de la infancia y una voz finita de esa que hacen los niños cuando actúan en su soledad espontánea. Por ahora me lo permito a este desvelo. Sé que tengo pilas de cosas que hacer y pilas para hacerlas, pero que hoy no pude conciliar el sueño luego de despertarme en el futón de haberme quedado dormida viendo esa película de amor de Winona Ryder y de esos arquetipos femeninos de historias amorosas. La última vez que me sucedió esto mismo de quedarme dormida con esta película, fue antes del retorno de lo reprimido, allá por Mayo. Allá por el Otoño, el cumpleaños de mi mamá. Ayer por la Primavera, el cumpleaños de mi papá.
Creo que este es el momento de hacer mi propia historia de amor, mi propia relación de pareja. De saltar al abismo del más allá de edipo y de sus intrincadas desventuras. Decantó por sí solo, las palabras me fueron conduciendo sola a esta conclusión. Y para todo esto hay un paso previo, del que ahora me realizo. Cuento lo que puedo y quiero contar, los detalles sean irrelevantes.
El camino del desvelo que condujo a mi cama. En la habitación sonaba Bebel Gilberto, rallada. Y pensaba en lo que había sucedido a penas unas horas antes. Pensaba que quería escribir sobre aquello, en mis archivos privados. Y que luego ensayaría una especie de conclusión aquí mismo. Fue lo que hice, pero antes de escribir, me puse a revisar un poco las historia de algunos escritos. Y ví tantas cosas con tanta claridad, que casi me espanté del horror evidente. Pero acudí a ese ayuda memoria, conducida por una revelación que me hicieron hoy por la noche. Una confesión que nunca había estado tan clara, o que yo no había nunca escuchado con esta misma disposición de ahora. Se habló del pasado, y se exorcizó. No se ha curado todavía, pero sanando va de a poco. Hoy de nuevo me toca esperar un turno. Y no lo vivo de esa manera. Lo vivo como un proceso de maduración. Que este tampoco sea el momento, no me inquieta, ni me asusta. Más bien, lo sé con plena certeza. Y también sé que estoy aún más cerca que hace un tiempo atrás. En standby nuevamente. Ese es sólo un ingrediente fundamental de tal desvelo, hay otros aderezos-ingredientes. Mis encías sangrantes. Me cuesta ver mi oscuridad. Pero no la puedo negar, porque es bastante fuerte y agobiante de sentir.
Hace un tiempo atrás estuve metida en una relación de la que siempre hablo mucho, por lo calante que fue la experiencia, pero nunca quizás con tanta honestidad como hoy. Y hace un tiempo nomás había decidido callarla, para dejarla irse lejos, bien lejos. Hoy resurge esa realidad porque es coexistente con esta a pesar de haber calladola previamente para evitar que vuelva a despertarse. Hoy le hecho tierra, me paro sobre ella, lloro mi breve llanto, y miro al horizonte con una sonrisa de amanecer. Me siento un vampiro. Mucho tiempo me sentí un vampiro y a la vez me sentí vampirizada por aquella persona. Juntos nos íbamos a dormir a la hora que los vampiros iban a dormir. Y casi siempre soñábamos pesadillas juntos, pero ya no podíamos arrancarnos más piel, entonces nos dejamos ir. Esa es la oscuridad de la que hablo y de la que me hago cargo, con mi capa de maga. Yo sé perfectamente que esa experiencia de amor me transformó los cimientos. Pero no gracias a él. Sino porque él potenció aquello en mi. Pero aquello ya existía desde siempre. Asumo que algunos me podrán entender. El enemigo no está afuera, sólo que se ve a través del reflejo de otros. Lo que se refleja es la propia enemistad, la traición original a nuestra naturaleza, la de haber caído por orgullo de rodillas. La de haberse arrastrado humillado en su propia tierra. La tierra absorbe, atrae la oscuridad. La pega a si misma. Para levantarse de aquella atracción oscura es necesario conectarse con el cielo, con la mirada hacia arriba. Ya no vemos solo la tierra donde yacen nuestras narices, ahora hemos levantado la cabeza, hemos visto cielo y luz. Ahora debemos pararnos sobre nuestros pies. Claro, desde la tierra. Con los pies apoyados en la tierra, sosteniendo nuestro propio peso de huesos, piel y órganos. Pero hemos sido creados bípedos, con una columna que necesita erguirse para poder caminar y crear. Y creer. Yo creo que esta vez puedo elegir otra realidad para mi, otra forma de acercarme al amor, otra forma de encontrarme con otro al que eventualmente llegaré a amar a través de conocernos. Lo que sucede ahora, es que recién me estoy despejando de aquellos restos kármicos y que las ilusiones que aparecen en mi vida, muchas de ellas me convocan a aquel lugar, pero ya no lo tolero. También elijo hoy conectarme con otras naturalezas, que traigan luz y vida. Relajación. Confianza. Entendimiento. Compañerismo. Juego. Disfrute. Sonrisas. Aquellas que despierten negatividad, deberán ser dejadas, alejadas. Algo aprendí del autopreservarse en este tiempo. Algo aprendí, algo recuerdo, algo olvido por momentos cuando me dejo llevar por ese poco de oscuridad que aún habita en mi. Pero esa leve oscuridad está cada vez más iluminada con entendimiento.
Ahora será momento de redefiniciones.

miércoles, 17 de octubre de 2007

sor (a) prendida







tierra,

¿ qué me has hecho ?

pies donde sentirme
extraña.


agua,

¿ qué has traído
en tu seno ?

corazones razgados
remendados,
que sanan.


fuego,

¿ qué le diste
a mi sonrisa ?

encendiste la chispa
y en los ojos
un templo iluminaba a borbotones
el cáliz de la vida.


aire,

¿ que secretos
me has susurrado ?

Hoy prefiero escucharte
murmurarme a lo lejos.


lunes, 15 de octubre de 2007

news energies

¡¿Por dónde empiezo?! Algunos dirán: "Pues por el principio, tía".
El principio no siempre es por dónde se cree que es. En este caso es una aventura que comenzó el jueves a la noche, cuando volvíamos del taller de los jueves, para emprender camino a Laprida. En aquel lugar de la provincia de Bs. As. a medio camino entre Capital y Bahía Blanca, en donde tomarían cuerpo las Jornadas para la Educación por el Arte de los próximos tres días por delante.
Bien. No voy a poder seguir ningún orden estipulado de antemano. Porque son muchas cosas, muchas vivencias, o mejor dicho, intensas vivencias por aquellos intensos días. No sé qué me preocupa tanto del orden, si ya ordené los petates de la mochila grande y de la chiquita, si ya me bañé, si ya me hice unos ricos mates amargos de lunes feriado, y si estoy en mi casa por la mañana escribiendo recién llegada de Retiro, de Laprida, de la vida.
Había que elegir dos talleres de los diversos ofrecidos, todos en relación con alguna disciplina del arte, para docentes y para no docentes, para legos y para curiosos, para pueblerinos, para capitalinos, para bonaerenses, marplatenses, bahia blanqueños, olivarrenses. Yo no me sentía representante de ningún lugar, pero decir que uno viene de Capital, aunque aclare que no vivió la mayor parte del tiempo allí, sino en las afueras, no resulta indiferente. Se respira un aire distinto, otro ritmo, y mucha conexión, más allá y más acá. Salvando las diferencias, que son realidades humanas, estábamos todos los que estábamos, dispuestos a esta experiencia.
Elegí dos talleres: Danza en Espiral y Taller Literario de Poesía enfocado en la musicalidad de las palabras. Por la tarde y por la mañana, respectivamente. Entre medio, mate en la plaza, micros, baños públicos y privados, habitación compartida con seis personas y una séptima alternante, festejos, bailes, batucadas, color, mucho color, mucha variedad, muchas vertientes confluyendo en el mismo lugar, alegría, balneario paraíso con laguna, glicinas de abejas zumbantes, sauces, patos con formas de bandadas, pasto verde pasto, un poco nublado al principio, en pleno sol al final, escasas lluvias, un poco de frío, carbonadas, ravioles, choripán, pizza, vino tinto, chocolate, mucha agua, transpiración, liberacion, alegría, alegría, alegría, a mi corazón. Y emociones encontradas a montones. En términos generales, increíble, pero verídico. Jugué el juego, aún lo sigo haciendo, y me pude escurrir de algunas ilusiones, también, por suerte y gracias por las auténticas compañías. Me reí, hice magia, jugué, bailé, canté, compartí, me metí de lleno a aplicar eso de transitar lo más despierta posible los lugares que transitamos. Hubo algunos escasos momentos en los cuales me confundí un poco de objetivo y desvirtué algunas realidades (maximizar y minimizar vienen al caso, en idénticas cantidades) pero esos escapes, esas huídas, se encontraban contenidas de alguna manera. Era un retorno breve y un alma interna de despertar de esas fantasías a tiempo, para no perderme verdaderamente de lo que vine a buscar aquí.
¿Qué vine a buscar aquí? Ahorita lo contesto. Primero conecto. Estoy escuchando a los sufíes, y me afinan la puntería tonal de este escrito. ¿Qué encontré aquí? Pues creo que esa pregunta habilita una respuesta más acertada para responder lo que me propongo responder a grosso moddo. Vine con expectativas, no lo puedo negar. Como toda aventura desconocida, siempre existe una cierta dosis de anticipación. Pero fui bien preparada, agradezco nuevamente a las voces acertadas que me guían razones, sentires y acciones más acertadas. No estoy haciendo todo este trabajo de transformación al pedo. Lo lamento si esto los decepciona, o los maladvierte. Celebro si los contenta y los alegra, porque eso indica que estamos conectados en una verdadera frecuencia de compañerismo, lejos del egoísmo, cerca de la redención. Cuando uno está implicado en la transformación interna, encuentra verdaderos compañeros de ruta y también encuentra de los otros, que encarnan la enemistad egoíca que distrae, por lo mismo que exige encontrarse centrado para no dejarse vencer por la misma. Tal vez las pruebas se hallen más a la vista, si nos encontramos atentos a verlas. Las diferencias, pues son todo un tema. El verdadero tema, es el temor que no se las banca, porque condena lo ajeno porque de algún modo sacude lo propio. Cuanto más seguros estamos de quienes somos, menos tememos a las diferencias y más nos enriquecemos con las mismas. Porque el otro diferente no representa un riesgoso oponente adversario, sino más bien un aliado compañero humano.
Iba al grano de la semilla y me perdí nuevamente, pero por buenos caminos necesarios de ser escritos también. Son muchos los hilos que convergen. Ahora toma la voz el hilo de una premisa anterior, "no estoy haciendo este trabajo de transformación al pedo". Y esto ¿qué implica? Que me estuve preparando desde hace mucho y que me estoy preparando actualmente y esto va en simultaneidad con el proceso, del cual a veces hablo, pero no quiero agotar.
Si. No elegí estudiar Psicología por casualidad, por aburrimiento, ni por mandato. Elegí desde una inquietud interna que ubico desde que tengo memoria para hacerlo. Tal vez el origen no sea tan exacto, es más bien una semilla familiar, hasta diría genealógica. Pero esto no implica raíces sanguíneas solamente. Implica mucho más. Una búsqueda personal y a la vez colectiva, de algunos seres que habitamos este planeta. No me creo especial por eso. O está o no está. No hay más rollos. Desconozco otra manera. No invalido por ignorancia. But sacro ignis it´s not just a concept. It´s an experience with your eyes wide open.
Elegí una búsqueda que algunos podrán entender, otros condenar, otros no entender, otros ignorar, otros resonar. Dentro de esa búsqueda fui acotando y precisando cada vez más lo que busco. Y lo fui entendiendo cada vez más claramente, con el correr del agua, que no siempre fue clara. Claro que hubo momentos de confusión, los sigue habiendo ahora también, sólo que no abundan, no inundan, en este momento la mayor parte del tiempo y del espacio, a la luz de la lámpara del ermitaño hermes. Claro que en esta búsqueda andamos a oscuras, pero somos nosotros los portadores de la lummen guía. Vamos viendo y los ojos alumbran algunos espacio-tiempos más que otros de esta realidad clarooscura. En algunos otros ojos que apuntan a la misma búsqueda esencial nos encontramos y compartimos esa refracción luminosa. No necesariamente y sólo a través de las palabras. Los símbolos intermediarios son diversos.
Vuelo a Laprida por un instante. Vuelvo a los talleres que elegí vivenciar. Fue una elección genuina lo que hace que los encuentros con otros sean más genuinos y que a la vez se pueda compartir mejor la singularidad. Empiezo por el primer taller. El de Danzas en Espiral, y cuánto me llamó la atención esa convocatoria explicitada en términos de micro y macro cosmos, ying y yang y tai chi. Mejor conjunción de intereses imposible. Fue llegar allí y sentir que estaba en el lugar correcto en el momento indicado. Otra vez Sincronía para la Evolución. En mi camino Psi, tuve que juntar cojones y animarme a buscar lo que no encontraba en la facultad Psi, pero que habitaba en mi y en algún lugar afuera de mi. Comienza la búsqueda que comenzó desde mucho antes, por el tema corporal y por el tema movimiento, por el tema danza, por el tema introspección, por el tema conexión. Ya hablé en alguna otra oportunidad de esto, pero actualmente estoy siguiendo los ciclos que comencé con Antigimnasia. Aproximarme al cuerpo y a la psicología, empieza allí. Luego veré por donde continúa. En este taller, la profesora etérea. El salón iluminado. Los sahumerios. La música. Y acompañando la experiencia, algunas palabras, escasas pero acertadas. Silencio y reconexión. Trabajamos con las cuatro estaciones. Primero vivimos otoño e invierno, en la piel y en los huesos respectivamente, y en el dejarse caer para poder sostenerse. La Tierra y el Cielo. Los ciclos de la luna mujer. Los arquetipos femeninos. Despertar esa energía que albergamos cerca del ombligo que conecta en espiral con la coronilla. Los chinos dicen, despertar la energía para sostener la espada. En términos anatómicos, despertar el sacro para iluminar la columna y conectar lo que corre a través de nuestras células nerviosas. Yo no sé en profundidad de este tema, pero los chinos saben, la profesora sabe y yo me dejé guiar en esta experiencia para recordar lo que sabía y para aprender lo que desconocía. Esto recién comienza. Pues, ya lo dije, por mi búsqueda auténtica, dí con el lugar indicado. ¿Cómo no disfrutarlo? Trabajamos también la primavera y el verano respectivamente, la improvisación, la danza ancestral y gutural que nos habita. Despertamos a los huesos y los pusimos en movimiento siempre teniendo presente la conexión que existe en el cuerpo de la tierra y del cielo. Siempre advertidas de los centros positivo y negativo de nuestra naturaleza en comunión. Los que se conectan a través de la columna y con el sostén de la perisferia. Brazos, piernas y cabeza. Articulaciones óseas sostenidas por la piel. Los límites, los bordes. Esto fue una convocatoria interna a trabajo sutil y profundo. Claro, había resistencias, dolores, incomodidades, imposibilidades, impotencia, pero luego de cada encuentro una reactivación energética corporal y más allá, indescriptible.
Voy finalizando esta cebadura lapridense, con el relato experiencia del Taller de Poesía. Nada más ni nada menos que una profesora notable, que se apellida Colángelo, que adora el color de las violetas, que se carteaba con Galeano, que habita la ciudad de Bahía Blanca y que desde hace veinte años recorre las calles con un susurrador de poesía que se construyó con un tubo de cartón. Notable persona. Un gusto haberla conocido, porque la poesía no tiene tiempo ni espacio, sólo existencia. Yo no sabía de quién se trataba la que dictaba el taller en las jornadas, sólo apeló directamente una propuesta que viene aconteciendo y que es el reencuentro con la poesía, desde un lugar diferente, en relación con la musicalidad de las palabras. La poesía tiene un ritmo especial. Las palabras que se hayan con mayor frecuencia en las mismas, tienen una intención mágica que conjuga con belleza (esto incluye la dimensión de lo horripilante y de los excesos) imágenes, sentimientos, sonidos, metafóricos. Sería algo así como la plástica de la escritura. La demostración más exacta de la sublimación escrita. Ya que con las manos me hayo más cómoda si las escribo, tengo una sensibilidad especial para los colores, pero mis trazos son algo infantiles y no demasiado sutiles. Pero con la palabra me hayo más cómoda. Con el sonido me hayo más cómoda. Con la escritura me hayo más cómoda aunque la complemente con otras formas de expresión. Ya dije, la mente es una de mis fortalezas y otra de mis limitaciones. La mejor forma de hacer algo con estas limitaciones cuando se vuelven excesivas es transformarlas en sentido y mis herramientas, las palabras, las letras, y los signos que las organizan. También me gusta innovar y romper esquemas con las mismas. Sobre todo, me gusta experimentar.
Pues nos encontrábamos por las mañanas en la biblioteca popular de Laprida, sobre la calle independencia, casi enfrente de una panadería tentadora para esas horas. Una biblioteca antigua, con un salón precioso que daba a un pequeño jardín. En la habitación donde hacíamos el taller, convivían con nosotros dispuestos alrededor de la mesa de madera oscura con historia, una gran biblioteca prolija con libros de tapa dura y colores sobrios. Una especie de mini auditorio formal, en donde los próceres se hallaban presentes también. Dos días de trabajo, pocas personas de variedad heterogénea, bebés, adolescentes, jóvenes, adultos, ancianos, vecinos y visitadores ocasionales. Un poco de todo. El trabajo comenzó con el hilo de ariadna que nos presentó a todos de algún modo y nos entretejió circunstancialmente. Voces diversas convergían en una misma orgía de palabras personales. Un propósito: acercarnos a la poesía, desde diversos autores y desde nuestras producciones personales y construir un susurrador, a través del cual recitaríamos en la exposición final alguna producción elegida propia y ajena. Fue una experiencia revitalizante. Y me pregunté una vez más, porqué dejé de lado tanto tiempo este tipo de experiencia. Ahora tengo ganas de hacer algún taller literario, pero no me puedo meter aún en más actividades hasta que no me quede tranquila con algún trabajo temporario que lo pueda sustentar. Bueno de allí, les acerco mi producción final y aclaro, me animé a susurrarla con el dispositivo en el acto final. Y me sentí muy bien. Inolvidable.

ASOMARSE DESCALZO
AL VERDE DEL PASTO
ES EXPERIENCIA ALQUÍMICA
DE MEZCLA AUTÓCTONA.
EN TONOS TRIGO,
EN TONOS RÍO.

jueves, 11 de octubre de 2007

soyestoy

SOY O ESTOY - CAFÉ TACUBA

el otro día hablando de las tretas
que la mente juega
es difícil de creer,
y esto que te digo
es otra de ellas:
la mente anda suelta,
no se deja de mover.
antes yo creía
en el imperio de la cabeza,
no era yo, era la cabeza
quien dictaba esa razón.
no hay razón de obedecer
si ni siquiera estoy en el cuerpo
que responde al nombre
que otra mente inventó.
otro día hablándome sin freno,
diciendo tonterías
que ocupan el espacio y el tiempo
del presente, como una tabla de surf me voy
a un lado y al otro,
por más que intento no me mantengo en él.
hoy me doy cuenta del tiempo
que he desperdiciado
pensando en lo que eres y lo que no,
en vez de sólo vivir la experiencia
de tu ser que sólo existe en mi mente,
el día de la muerte la percepción del otro cesará,
es que en realidad,
¿soy o estoy?
es un juego muy tonto del que no podemos salir,
si sabemos que nos queremos
pero no lo podemos decir.
es que en realidad,
soy o estoy,
es que en realidad,
soy o estoy.

En el transcurso de la semana, que para mi comienza los jueves, fueron decantando variadas vertientes de agua. Hoy sigue la lluviecita, pequeña y molesta. Hoy comienza la misión colectiva del mono azul: el que ve el juego, lo juega porque ve su ilusión y se anima a bucear en lo que encuentra de él de sí mismo, entonces se divierte, se ríe, se la pasa bomba de liana en liana de banana en banana, pero no se lo cree. Está bueno usar otros lenguajes para hacer la prueba de vivirlos también como otro hilo simbólico más de la compleja realidad de la que somos acto y actores. Si se dejan vivir esta energía colectiva, pues no pierden nada. Jueguensé. No más. Ni menos. Estamos también en la estación de los frutos. Disfruten. No más. Ni menos.
Pues entre las aguas que decantan hoy les dí la bienvenida con una canción que descubrí recientemente de Cafeta. Una canción que por primera vez captó mi atención luego de que tanto tiempo viví preocupada por el ser. Ser esto a aquello. Quien soy. Quien no soy. Quien sos. Quien no sos. Estuve mucho tiempo preocupada por aquello, lo cual me hacía recurrir al existencialismo innato de quien se hace demasiadas preguntas. Y demasiadas aclaro, porqué no concibo una vida que no se hace preguntas. Pero una vida que se hace demasiadas preguntas, puede resultar demasiado juiciosa. Y los demasiado desvirtúan los sentidos. Entonces pues pasamos a esta vivencia, que me la transmitían variadas personas cercanas. Esto de "Lu, tomate tu tiempo, mirá por la ventana, escuchá a los pajaritos, tomate un mate, respirá siguiendo el aire en tu cuerpo. Lu, conectate con la realidad. Aprendé a vivirla, a disfrutarla, aún en los placeres más sencillos" ¿Acaso no se trataría de eso? ¿Acaso no sería más simple la cuestión? Es que acaso no lo veía de ese modo, porque mis sentimientos estaban alborotados porque no se querían entregar, porque tenía mucho miedo, porque porque porque. Por el apego. Porque no quería soltar aquello que me hacía mal. Ahora no lo entiendo. Ahora no entiendo qué me detuvo tanto tiempo. Pero en ese momento, esa realidad resultaba implacable como la certeza. Pues lo quise creer. Y lo creí. Y me lo viví de principio a fín. Sin embargo, ya algo había comenzado a intuir. Una parte de mi, o varias, no alcanzo a distinguir con seguridad, había cambiado. Veía otras cosas. Había aprendido mientras meditaba en la caverna de Hermes, otras cosas. Había llegado a nuevas conclusiones. Había visto desde otras realidades. Y comenzaba a sembrar semillas en su pequeño jardín otoñal. Esas semillas las había seleccionado de la cosecha anterior. Una cosecha muy solitaria y dolorosa. En donde se había realizado de que algunas cosas prefería modificar, y que esas cosas habían sido producto de si misma, no de la culpa de nadie, ni del otro, ni de vos. Y no se trataba de culpas, sino de responder por aquellos actos, los que había generado, los que había compartido, los que había vivido también en solitud. Así es como se propuso en su meditación alternada que comenzaría de a poco a sembrar algunas semillas por aquí y por allá. Algunas otras semillas ya no le servirían para sembrar, porque se habían consumido, desgastado, aplacado. Ahora que había una nueva oportunidad de entregarse a una parte muy importante de lo que siempre había querido para si misma, pero que como lo tenía tan cerca no lo veía. Ahora que lo había conocido en el bien y en el mal, ahora que se había visto en cambio. Ahora que lo había revivido, podría elegir mejor. Decidir. Y bueno, me voy por las ramas de los árboles de los brotes de las semillas y de sus raíces arraigadas a esta tierra. No lo puedo evitar por ahora. Pero ya asenté que lo estaba revisando. Cuando me voy acercando al zoomum de pronto me alejo por expansión a otros cuadros. Y me pierdo. Cuando vuelvo, no sé de dónde retomar la retama. Estaba en el Ser o Estar. En los frutos de las semillas seleccionadas de la cosecha anterior. En el porqué de esa elección. Sólo pretendía acercarme a lo siguiente: lo que significó pasar de un estado a otro. Yo decía que la canción de Cafeta decantó como agua de mi vertiente aquel jueves pasado, cuando en la clase de la profesora loca de los grupos células de cambio en la facultad de Psi, me encontré con la siguiente revelación. Que no hubiese detonado estas notas si no fuera porque cuando uno conecta, pues sorpresas te da la vida, la vida te da sorpresas. Algunas sorpresas no sorprenden tanto, otras pasan desapercibidas y otras abren mis ojos como un niño que por primera vez viene a este mundo. Como los gestos auténticos de Bjork, por ejemplo, o del niño Santi de Flor, o del viaje culinario a Japón con Marce. Confluyen pues las vertientes, luego de una semana de vivencias. Y no sé porqué se me da por dividirlo en semanas de siete días, pero el siete es un número místico, también que tiene siete letras siete esa palabra. Otra vez las ramas del árbol de la vida de la Kábalah. Siete letras siete. No sé cuántas ramas.
La profesora loca de la facultad de psicología, nos habla. Entre todas las cosas que dice y que nosotros decimos en ese espacio, pues aparece una historia. Ella cuenta acerca de una teoría de algunos investigadores, de algún libro que leyó, de alguna canción que escuchó, de alguna vivencia que vivenció. Y allí aparece un dilema de información. No sé la fuente exacta, soy un poco superficial en el approach a la información. Tomo de aquí y de allá, pocas veces profundizo en algo. Pero eso que tomo se conjuga con otras palabras de mis pensamientos y producen entonces entendimiento de algo nuevo. De algo que a mi me hace signo. Como si entonces cerrara una pregunta y abriera otra pregunta nueva, y de eso un aprendizaje nuevo se instala en mi conciencia. Esto me llamó la atención porque convocó los hilos de mi inconsciente que estaba viviendo otras cosas por entonces. La historia es así, los habitantes de estas tierras, los originarios, tenían una vivencia de la vida distinta de la de sus colonizadores, que venían de otras tierras, con otros orígenes y otras historias en su pensamiento civilizado. La persona que teoriza en cuestión, dice que filosóficamente aquellos estaban ocupados con su Ser. De esta teorización las profundas filosofías que surgieron allí. Pero nuestros originarios tenían una cabeza distinta. Tanto es así que nos cuentan que cuando los vieron llegar desde el otro océano, ellos vieron a Quetzálcoátl. O a la serpiente emplumada, como los sabios habían visto en sus poesías proféticas. Y los que venían no se veían a si mismos de esa manera, ellos se veían como fugitivos aventureros con armaduras en barcos a colonizar, a clavar la bandera de quién la tenía más grande. Claro que ellos se pensaban a si mismos como conquistadores. La palabra lo dice por si misma. El poder corría en su pensamiento y en su sangre. ¡¿Vendrían a enseñar o a conocer? Tal vez no se lo habían planteado en esos términos, y no cuesta tanto imaginarlos. Pero una diferencia de tiempos me hace difícil acceder a ese pensamiento.
Los seres originarios de aquí, pues vivían en contacto con el Estar. Así lo dice aquel teorizador. Aquí la conquista del Ser al Estar. Aquí el dilema. En nuestra sangre hemos sido concebidos con este conflicto. Podemos experimentar ambas fuerzas. O quizás propongo otra cosa. Las palabras utilizadas, las que elegimos para actuar este conflicto, pueden no encontrarse en conflicto. Pueden apuntar a lo mismo. A una experiencia demasiado privada y singular para poner en palabras. Insisto una vez más, las palabras no pueden abarcar demasiado en algunos sentimientos-cosa. Yo propongo lo siguiente, la inquietud del que se pregunta por el ser, quizás sea demasiado abastracta y corre el riesgo de desconectarse de la premisa de la que parte. Cuando se siente estar entonces se pregunta por ese ser que siente que está. Rec{orcholis! Se lo pierde! Se va lejos, lejos se va. El ser que está, puede no preguntarse nada y eso es un poco grave, porque vive sometido a la inmediatez de su experiencia y da por sentada su realidad. Eso lo duerme. Pero hay una posibilidad de conjugación de ambas palabras y eso es posible gracias a una experiencia, la del ser que siente que está y tiene sus sentidos abiertos para conectarse con lo que es en ese momento. No se siente solo, se siente invadido, o mejor dicho, sumergido en eso que vive, pero no se lo cree. Los disfruta con sus sentidos, pero sabe que él es portador de esos sentidos. Cuanto más pretendo acercarme, más me alejo.
La canción de tacuba estuvo presente en mi mp3 durante este último tiempo. Primero me llamó la atención su título. Luego me llamó la atención su letra y música. De lo que hablaba. Y luego hice la conexión de las dos cosas, del nombre y de la experiencia. Y eso me trae a este momento presente, en el que decido compartirla acá, en este espacio, desde mi cabina telefónica abierta al mundo de las palabras e imágenes. Quiero aprovechar esta oportunidad para comunicar que ese disco, del que esa canción es parte, es imperdible. Ese disco se llama Cuatro Caminos. Algunas canciones han "pegado" más que otras en esta cultura. Lo que allí encuentro es una obra que viene a mis oídos en el momento exacto. Y descubrirla de a poco está buenísimo. Hace conjunción con mi experiencia como un eco de profundidades imperceptibles. Me puedo remontar entonces a México. Dijeron por allí que cuando mamá me tenía en su panza visitó ese lugar con papá. Puedo elegir este dato, pero la experiencia se proyecta mucho más allá en mi historia. Conocí a Cafeta en mi niñez adolescencia. Hice un trabajo de los Mayas y de los Aztecas. Vi fotos de ese viaje. Luego viajé a esas tierras y se me movieron las estructuras. También estudié gnosis, que viene de aquellas tierras. Estuve en la casa de Frida entre otros lugares y en Oaxaca. Conocí a gente que nació en México, cuando viví en EEUU, que fueron amigos míos durante ese momento. Conocí a gente que estuvo exiliada en México, la conocí a Lila Downs, y me reencontré con este disco de los tacubos. Si yo quiero buscar datos en mi mente que justifiquen el significado, no tengo problema en evocarlos, pero esta experiencia se trata de mucho más que eso. Y sin aquello creo que no la hubiese podido vivir.

miércoles, 10 de octubre de 2007

I be lieve in miracles


(yo soy amo ojos miran oráculos espejos)


Seguimos bajo el halo de Pearl Jam, en vivo. CDs mis primeros regalos auténticos por entonces. Ese título, cover de Ramones, más yo lo conocí primero por Eddie. Grande tipo en camisa cuadrillé y leñadores. Con una voz de las más preciosas del reino masculino. Rabiosa but mellow. Lindas mandíbulas, linda humildad de buen tipo, mascullando existencialismo. Un guiño para él. Espero que cuando vuelvan a tocar en la Argentina, yo los esté viendo desde el campo o desde la platea en vivo y en directo con ustedes. Ya que no pude ir aquella vez, ahora me ocupé de ir conociéndoles mejor en su música. El reencuentro puede ser mucho mejor. Los iremos a ver y seremos millones.

THUMBING MY WAY - PEARL JAM
I have not been home since you left long ago
I´m thumbing my way back to heaven
Counting steps, walking backwards on the road
I´m counting my way back to heaven
I can´t be free with what locked inside of me
If there was a key, you took it in your hand
There´s no wrong or right, but I´m sure there´s
good and bad.
The questions linger overhead
No matter how cold the winter, there´s a
springtime ahead.
I´m thumbing my way back to heaven
I wish that I could hold you
I wish that I had
Thinking about heaven
I let go of a rope, thinking that what held me back
and time I´ve realized, it´s now wrapped around my neck
I can´t see whats next, from this lonely overpass
Hang my head and count my steps, as another car goes past
all the rusted signs we ignore throughout our lives
choosing the shiny ones instead
I turned my back, now there´s no turning back
No matter how cold the winter, there´s a spingtime ahead.
I smile, but who am I kidding?
I´m just walking the miles, every once in a while I´ll get a ride
I´m thumbing my way back to heaven.

martes, 9 de octubre de 2007

gris es

Otro reencuentro para un día nublado, mojado, lluvioso y fresco. En gris perla, de Pearl Jam. Hace tanto que no te escuchaba...! Que ya te extrañaba...
Hoy un poco de malhumor mañanero, por posponer el estudio, por no dormir temprano, por no aprovechar el tiempo disponible, ha sido revertido una vez más con voluntad de cambio. En vez de desquitarme con el mundo por mi culpa, y gracias a mi gente querida, en parte, me puse a leer, y ya la tarde se siente diferente. Luego en una hora a la clase de la noche de los martes, a seguir laburando el significante cuerpo, sus emociones y sus recuerdos musculares. Capaz que aproveche también para poner en orden aquellos papeles pospuestos. Capaz que sería bueno hacerlo de una vez.
Esta música me hace acordar a una época particular de mi vida, que recuerdo con mucho cariño, hace un par de años atras. Y no es casual que la elija hoy aquí, para hacerle honor a aquel romance inconcluso, que continúa interrumpido. No pienso dar nombres, pero es una lástima que otra vez nos hayamos desencontrado. De todos modos me alegro que a pesar de los desencuentros nos sigamos acordando uno del otro. Lamento por lo que hice mal en aquel momento, pero el proceso me tomó más tiempo del que esperaba. Y ahora que de algún modo estoy despejada, volvemos a no coincidir. Por el resto, te tengo mucho cariño, y te deseo lo mejor para tu vida. Si tiene que ser será, pero siempre será bienvenida tu franqueza. Y en parte gracias a tu influencia, la creación de este espacio blog.
Estos últimos días no hago más que recordar cuando me encuentro a solas. Otra sorpresa de la Caja de Pandora. Supongo que de eso también se trata: de recordar para aprender. Lo más novedoso de la cuestión es que no alcanzo a procesar todo lo que estuvo sucediendo en este último tiempo, como si se mezclaran dos momentos paralelos, por un lado la novedad, por otro lado la memoria. Por un lado recuerdos viejos, por otro lado, nuevos recuerdos, nueva memoria. Y lo mejor de todo es poder confluir con ambas caras de la moneda en este instante. Me siento bien, más segura que hace un tiempo, más madura, más centrada, más equilibrada, más alegre, más estable. Todo un avance a pasos de caracol que se catapultan a pasos de oruga en tránsito de conversión a hermafrodita volador. Hay cosas que no se pueden expresar bien en palabras, ojalá les pudiera mostrar de alguna manera lo que siento. Hace tiempo que trato de describirlo, pero no me encuentro satisfecha con el resultado final de cada intento. Pueden notar que de algún modo algo se modificó rotundamente, y no sé bien cómo sucedió, pero fue repentino. Fue un largo camino también. Lo que ahora encuentro en común con el momento de encuentro con Pearl Jam, se estaba empezando a dar este cambio, pero aún me hallaba a oscuras y con mucho dolor. Pero esos momentos los recuerdo como un resurgir de la libertad, a la cual me estaba acomodando, hasta que el azar confluyó y me sacudió una vez más. Ese momento coincide con las fotos que una vez incluí, las épocas de festejo descontrolado y alegría de pastillas. Ahora, sin pastillas y con la sonrisa más templada, pero más segura de mi misma, de lo que quiero. Está bueno crecer.

más libertad

cáscara de cháchara:
{Bueno gente, el clima está lluvioso de nuevo y me refugio una vez más en la noche, en el sonido del agua y en este cuarto en el que suelo escribir cada vez más a menudo. Un lindo ritual, un buen espacio para seguir contando de qué se trata esto de vivir sin nubes. Ahorita estoy escuchando una lista de música vieja, que armé hace unos años atrás, cuando vivía en Bella Vista. Se llama Lucilda (la bruja interior), la lista en cuestión, una lista de puras canciones en español casi todas de rock nacional, podría ser un programa de la Mega, y es música con la que me gusta reencontrarme de vez en cuando, para recordar pero para algo más, para escuchar con nuevos oídos, ya no tan tapados de fantasmas y de sombras densas del pasado. Ahora suenan los redondos y los juguetes rotos que se perdieron con las banderas de tu corazón. Antes sonaba Celeste con Juanse, en más libertad, camino a Coronel Pringles. En este momento de cambios y de apertura, reencontrarme con los orígenes resulta muy placentero también. Los había dejado pospuestos por un buen rato, escapandome de quien era, de donde venía, de qué quería en ese momento de mi vida. Ahora algunas de aquellas cosas retornan nuevas. Mejor dicho, renovadas.

No tengo palabras precisas para describir de qué se trata este momento, pero sé que es un tiempo muy importante para mi, y de algún modo me alegro de que quede algún archivo que relate con la fidelidad de transcurrir esto que me está sucediendo y que a la vez impulso desde adentro a que suceda. Ahora viene bersuit y el caramelo, y no hago más que remontarme al San Pedro Rock con mis amigas, en ese verano del 2003. Cuánto tiempo que ha pasao... se ve que ando medio melancólica también, es que me estoy despidiendo de a poco de mi pasado. Ya lo dejo ir, que se vaya. Ya se fue.
Vuelvo al aquí ahora. Tengo buenas noticias, lindas noticias. Hoy me dieron la nota de uno de los parciales que di hace un par de semanitas, Psicología del Trabajo, un redondo ocho. Y pronto se viene el segundo parcial, me tengo que poner al día. No sólo palabras, sino fundamentalmente hechos. Otra buena noticia es que me voy este finde con la gente de creatividad a Laprida a unas jornadas de educación para el arte. Un linda aventura que me llena de adrenalina. Por primera vez sé a dónde voy. No sé si saldrá todo como lo planteo, y tampoco puedo planear demasiado, pero "el vector está orientado". Ya no tengo miedo a crecer. Mucho tiempo y mucho de mi crisis puede haber sido una gran y linda resistencia a este hecho madurativo inexorable. Pero la verdad es que prefiero convertirme en un ser mujer, y no en ser niña arrepentida y temerosa. La niña no se irá a ninguna parte, sólo se adaptará a algunas realidades que le cuestan aceptar. La niña seguirá viva dentro mío, seguirá jugando, riendo, haciendo travesuras y enchastres, pero será conducida y aconsejada por la mujer. Protegida, no abandonada, no pidiendo que le indiquen el camino, sino haciendo por si misma. Porque ahora está aprendiendo a cuidarse a si misma, a conducirse a sí misma.
Breve pausa. Percibí un poco de tristeza, un poco de melancolía montaña rusa. Pero no le di tanta bolilla. Sentimientos algunos a favor del pasado, otros a favor del porvenir, me han susurrado al oído, "pues niña es que extrañas tus recuerdos, cada vez están más lejos". "Zonzerías, niña. No sas zonza", pensé para mis adentros. En realidad ese pequeñín ápice de tristeza, son residuos del apego. Están allí para recordarte que no se puede volver a dónde ya se estuvo. Tal vez uno pueda quedarse quieto, estanco, paralizado como una mula terca. Pero por más que la mula se haya empacado con las patas metidas en el barro, con las uñas arrancando los pastos, pues le vienen arrastrando. Y en vez de seguir resistiendo de quedarse en el mismo lugar, le han convencido, que se hace más fácil el camino al andar. La trayectoria ha de finalizar en algún momento, y eso no se puede preveer en cuál, ni qué es lo que tendrá que pasar a través de. Son casilleros en blanco, algunos se pueden adivinar, pero nunca se ven todas las letras juntas. Se irán completando, elegiremos diferentes palabras sustitutas, así armemos cada uno nuestra historia en presente singular. Y por momentos, en plural circunstancial pluscuamperfecto
. ]

Luego aquí, en este momento, resumo un poco lo anterior, intento dar pocas vueltas, cada vez menos. Intento precisar porque no quiero temer y evadir. A veces se me da por boludear con pensamientos que se ponen distintas máscaras por turno y me enrosco sola como un rulemán. (Lulú es un personaje con muchos rulos. Le gusta distraer, para evadir el escollo, pero guiña un sólo ojo, por el otro lo ve)
Pasaron muchas cosas en este fin de semana, y casi ni reparé a desplejar el repertorio. Sólo sé que vale la pena la vida. Sé que me siento, por momentos enrarecida , pero que no dudo en continuar por este camino, porque así lo elegí yo. No se trata de hechos a detallar, se trata de transmitir que en la vida voy transito diferentes escenarios. El mejor rol que juego, es el que me mantiene despierta. A veces me duermo. A veces me pierdo. A veces me encuentro. A veces me reencuentro (catupecu, gracias). A veces llueve, como esta noche. A veces está nublado, como esta tarde. A veces brilla el sol, como esta mañana. Ahora escribo por ejemplo, y escucho por un lado el agua de la calle, y por otro lado el agua de la música de los piojos (piojos, gracias). Y el agua que pide de mi sed. Y el agua de río en los vasos de la ciudad, que serán, vasos vacíos. (cadillacs por la regata, a ud. también gracias)
Hoy esta música que elegí escuchar, es para recordar un poco hacia atrás. Y otro poco para celebrar con gracia haber llegado hasta aquí. Si tuviera un tinto cerca, brindaría con todos uds. Sé que todos tenemos momentos para brindar, para recordar, para desear, para agradecer, para pedir. Sé que brindarse a la vida se siente alegre y agradecido. Así como dar es dar. Y no contar las cartas que me han dado por las que dí. Ya me perdoné. Ya te perdoné. Ya nos perdoné. Ahora brindemos por lo que compartimos hasta aquí. Y que sea lo que sea. Que sea algo nuevo hacia adelante. Que sea un imborrable recuerdo hacia atrás. Sea irrepetible, y hasta quizás nos volvamos a cruzar en circunstancias atemporales, en aquellas que se proyectan desde el recuerdo, cuando las querramos volver a reencontrar. Mientras se repite la película en pasado, pues yo pensaré, que bonito haberte conocido en este vida, mi vida, ahora vivís en alguna parte dentro mío. Hola, Adios. Te llevo en parte conmigo, me llevas en parte contigo. Allí, en esas partes nos encontramos y nos guiñamos un ojo, y nos decimos sin palabras, cuánto nos hemos querido. Yo te sé. Tú me sabes. Hasta siempre por aquello.


fush fush! a la melanco:

AY, QUE PESADO - MECANO

ay, que pesado, que pesado
siempre pensando en el pasado
no te lo pienses demasiado
que la vida está esperando
ay, que pesado, que pesado
siempre pensando en el pasado
no te lo pienses demasiado
que la vida está esperando
cuanto tiempo hace falta
para que borres las heridas
que te hiciste en el amor
cuantas veces te he dicho
que solo tu tienes la llave
que abre y cierra el dolor
mira que hemos hablado
que los recuerdos son mentiras
y que inundan la razón
no hay que esperar milagros
porque tampoco los pedías
cuando hiciste el amor
no debiste hacer planes
tu no decides el futuro
cuando se trata de dos
mira que hemos hablado
que los recuerdos son mentiras
y que inundan la razón.

50 PALABRAS, 60 PALABRAS O 100
esta mañana me he levantado
y al darme la vuelta me he ido rodando
no hubo mensaje de despedida
solo unas flores en el suelo del salón
será que los colores
o el olor que dan las flores
es más fácil ir despiertos
será que las palabras
nunca expresan demasiado bien
algunos sentimientos
ahora solo quedan
las fotos de las paredes
y hay que repartir los muebles
ahora solo queda
que el camión de la mudanza
venga y lo haga sin tardar
una palabra, cinco palabras o seis
siete palabras o nueve palabras o diez
cincuenta palabras, sesenta palabras o cien.
será que con las nubes
o el barullo de los tiempos
no tenemos bien los nervios
será que con la luna
que no se pone redonda
se nos va la inspiración
una palabra, cinco palabras o seis
sie n te palabras o nueve palabras o diez
ci n cuenta palabras, sesenta palabras o cien

NO TIENES NADA QUE PERDER

las cosas que te han pasado
son de lo más normal
tu novia te ha dejado plantado
y se ha ido con un soldado muy formal
y no tienes nada que perder,
y no tienes nada que ganar
algo pasó en tu cabeza y empezaste a cambiar
han puesto una reja en la ventana
de tu celda porque has querido saltar
y no tienes nada que perder, no tienes nada que ganar
y por las mañanas el sol
pintaba rayas y cuadros tu cara de pájaro
y cuando te ibas a acostar
la luna pintaba de rayas tu cara de pájaro
y tu y yo
tenemos mucho que ver
y tu y yo; y tu y yo
no tienes nada que perder; no tienes nada que ganar
te convertiste en leyenda
en héroe nacional
te han puesto una estatua y una calle y una plaza
y una flor en tu tumba
y te has convertido en inmortal
no tienes nada que ganar

sábado, 6 de octubre de 2007

emotional landscapes


Le voy a dar la bienvenida a BjÖrk en este espacio. Ya la introduje de algún modo hace algunas semanas con Human Behaviour. Pero hoy me levanté de algún modo japonesa, y la lluvia lluvía, y el cielo estaba oscuro en gris, y el verde de la placita de enfrente de mi habitación, estaba bien verde, bien vivo. Entonces unos mates amargos calientes y una lectura de las sombras en la cama. Un placer tan sencillo como delicioso. Luego de alguna manera quería poner algo de música para comenzar a activarme y me crucé con Homogenic, un disco en el que ella está en la tapa en una imagen pintada de japonesa extraterrestre. No podía esperarse menos de la so encandinavian army of me. Ahora suena en azar en la máquina, pero hoy por la mañana sonaba en orden en el aparatejo sobre la musikbibliotek. Ahora la evoco, para armar algo aquí. It doesn´t scare me at all. And So Inmature. Innature. Paso a los hechos:
Recién termino de "pintar" con témperas, las que me quedan de algún tiempo atrás, en colores Violentos Violetas como introducción horizontal y bien cargada. Luego Naranja sumó al horizonte su juego de fuego en comunión con Rojo. No tardó en aparecer pequeño Amarillo, tímidamente inhibido por sus compatriotas peligrosos. Todo atardecer suponía ser hasta que se prendió en llamas. Para calmar los humos vino Verde que te quiero Ver. Su misión, un piso relajante de sustento esmeralda en otro pincel apto para lo acuarelable. A curar se ha dicho, y fue así. Curó minuciosamente en redondos trazos, pero tanta calma apaciguada en verde agua, llamó a fundir la polaridad blanco/negro. Digamos, algo así como un paisaje similar a la abstracción en colores netos de atardecer en jardín. Luego falta el toque final, aquel que vendrá a unir aquello que lo antepuso en el canson6. Y ahora clama por una forma reconocible. Ya escucharemos sus plegarias y daremos forma a la sustancia. Ahora lo dejo reposar, que asiente, que depure, que sea lo que es y no lo que parece cuando está todavía en proceso. I dare you to the contienda.
Ya quemé varios sahumerios esta noche para reponerme a este nuevo encuentro en solitud. Es madrugal, casi, ya pasó la medianoche hace un tiempo, no tanto como parece. Una vez más el mismo escenario, en casa sin hermanas, en viernes sabático. Fernet de por medio. Ahora té de manzanilla y rosa mosquita. Muy herbal la cuestión con o sin el agregado de frío o calor, alcohol o agua. Refrescante.
Comencé la maratón como expliqué antes, no tan temprano, pero me tomé esa licencia permitida sólo por hoy, si alguien me quiere creer. Me desperté descansada, como hacía días que no lo conseguía. Lo que dije del mate y de las sombras en japonés ya lo dije. Y retomo desde allí, un baño caliente tibio. Conversaciones con amigos y con padres. Lluvia y prepararse para salir a la calle a tomar el 105. Piloto negro, paraguas rojo, botas prestadas, y fosforecentes contrastes en amarillo y rojo carmín. Parada en Facultad de Psicología, sede Yrigoyen. Aula 29. Teórico. Tita. Apuntes. Cigarrillo. only true love waits. Práctico. Apuntes. 19. Casa de Floripondia. Así le digo a una amiga (previo consentimiento con la nombrada) que hace poco fue mamá de Santi, un precioso extraterrestre que vino a sus brazos, después de un parto ida y vuelta de dolor. Hace tiempo que no la visitaba, ya la extrañaba. La ví crecer. La conocí hace unos años atrás, en Educacional, la materia de Baquero. Yo en plena crisis existencial, más que plena, iniciando la euforia, presagiando su caída. Ella en pleno matrimonio. Cómo hemos cambiado ambas en estos años no se dan una idea. Cada una dentro de sus circunstancias, hoy nos encontramos a tomar mate dulce con bizcochos salados, mientras el niño obseva desde la carroza y desde nuestros brazos alternadamente. Ella es una madre con todas las letras, en realidad es una persona con todas las letras. Flor hizo mucho trabajo consigo misma. Eso es admirable y se percibe en hechos tan simples como en el obrar cotidiano. El niño es un personaje aparte, yo veo que dentro de ese cuerpecito pequeño que habita, emerge un ser que no es un bebé aunque lo parezca. Hoy lo miraba a los ojos mientras conversábamos con gestos y palabras, yo ponía las palabras, él los gestos en una diversidad increible. Cuando este pequeño conozca cómo usar las palabras nos va a dar vuelta a todos. Yo me incluyo, porque con orgullo soy su tía la loca.
Conectarse con estas cosas que parecían tan diminutas como virutas de lana, no es poca cosa. La vida toma una dimensión totalmente nueva para mis ojos que ahora brillan, y ya no están cansados. Conectarse con lo que no falta, con lo que está, no es tanto como un desafío, sino como una invitación a vivir de lo que realmente se trata esta vida. Este es sólo un ejemplo de este día, pero lo honro por lo que es, porque ha sido un lindo día y para derrotar la vitalidad, no hay lluvia que valga de excusa. Las excusas al excusado por favor y tiren desodorante de ambiente y abran la ventana, porque no queremos que se estanque la podredumbre de la pesadumbre. Que alumbren sus días esta corriente de amor y bienestar. No queremos pecar de insolentes ni de evasivos. Lo bueno también se comparte. Digamos que mejor compartirlo que guárdarselo sólo para uno. Lo otro también es válido y sus tiempos sean manejados desde adentro. No es esto una arenga de partido político que vende un chasco en propaganda de colores. Hay de todo y para todos. Hay de lo otro que preocupa lo que no ocupa, no lo niego. Pero hoy ahora prefiero conectarme con la difusión positiva, no con la confusión negativa. Una cosa no quita la otra, la incluye como opuesta posibilitadora de comprensión de la totalidad. Una cosa no tiñe la otra. La refuerza o la debilita. No me siento para nada débil. Voy con cuidado, no quiero pasar papelones.

JOGA - BJÖRK (homogenic)
all the accidents that happen
follow the dot
coinsidense makes sense
only with you
you don´t have to speak
I feel
emotional lanscapes
they puzzle me
then the riddle gets solved and you push me up to this:
...state of emergency...
...how beautiful to be!...
...state of emergency...
...is where I want to be...
all that no-one sees
you see
what´s inside of me
every nerve that hurts you heal
deep inside of me
you don´t have to speak- I feel
emotional landscapes
they puzzle me
confuse
then the riddle gets solved and you push me up to this:
...state of emergency...
...how beautiful to be!...
...state of emergency...
...is where I want to be...
...state of emergency...
...state of emergency...

ALL IS FULL OF LOVE
you´ll be given love
you´ll be taken care of
you´ll be given love
you have to trust it
maybe not from the sources
you have poured yours
maybe not from the directions
you are staring at
trust your head around
it´s all around you
all is full of love
all around you
all is full of love
you just aint receiving
all is full of love
your phone is off the hook
all is full of love
your doors are all shut
all is full of love!

jueves, 4 de octubre de 2007

Serestar

Noche de los jueves,
agotadamiento encendido azul francia,
ansiedad paranoide roja anaranjada
enojo injustificado verde amarillento.

A ver si conecto con algo más copado que la dependencia. A ver si me pongo las pilas esta vez y en vez de enfocar en exilio, enfoco en presencia terrenal real. A ver si esta vez me pongo las pilas en serio y pruebo otra manera de transitar despacio el camino del fluir. Si lo dejo ser, para que venga a mi. Y no me lo tomo en serio y lo dejo ser, y me sonrío. La manía de control me controla hasta los pensamientos más azarosos y todo ya sabemos a dónde conduce, a la obsesión, a la decepción, a la caída del barrilete al que me monté yo solita. Los colores del barrilete primarios, azul, rojo, amarillo. El pincel experimentando trazos en el espacio y en el tiempo.
Me cuesta no pensar en otros, en el otro, me cuesta enfocar en mi y dejarme en paz y tranquila en mi compañía. Lo primero que surgen son los objetos. Pero esos objetos internalizados establecen diálogos independientes en mi cabeza. Diálogos inventados. Estar. Ser. Ser. Estar. estás no estás hoy? estás centrada o estás desequilibrada? estás en movimiento caótico, llena de preguntas ansiógenas. Estas a la espera de algo, quizás, de una señal. Estás?
Estás en tu casa, escuchando música sufí, con olor a sahumerio de los hare krishna. Estás escribiendo en la habitación en dónde está la computadora. No tenés hambre por el momento. Estás en pijama inventado en rallado negro y violeta y en buzo canguro anaranjado de toalla símil. Estás sentada, frente a una pantalla, el cuarto está oscuro. Estás sola en tu casa, tus hermanas hoy no están aquí. Hay silencio. Hay música qué cómo describirla, un trance progresivo, el ritmo lo marcan tambores que retumban en varias dimensiones notales, y algún intrumento de viento que parece suena e improvisa un camino. Si te trasladaras a la música te imaginarías en un viaje, sobre un caballo, serías un hombre, o poco importa eso, en la noche, los árboles o el desierto. Sentirías una progresión que se marca al andar. Una progresión que no te inquieta, ni te deja pensando, una progresión por la que te dejarías llevar lentamente, sostenidamente. Serías con la progresión, estarías allí presente, más presente que nunca.
El sonido del viento en tus oídos, te acompaña, en líneas discontínuas estiradas y silencios. De base siempre constante el paso al andar, como un latido, a medida que varía le da un piso diferente del cual desplegarse en consonancia. Algo se fue tejiendo en el andar, no temais, más estarais. No te vayas, no te fugues, no te escapes, no te huyas. Estate acá, sostenga acá.
Pensamiento errático has de trabajar. Los pasos aceleran graves, los vientos juegan a que se esfuman agudos sin una predicción, sólo improvisación que crea matices únicos e irrepetibles. Existe una armonía, no un patrón rígido, un diálogo abierto, no una declaración cerrada. Silencio abrupto. Se suma la gravedad resonante, los vientos acompañan gravedad. Grave retumba en los huesos del cráneo, adormece fantasías, conecta con agudo, le hace un camino de posibilidad para que emerja, renazca nuevamente. Vientos alejan paisaje, visión infinita como pampa infinita, desierto infinito. Horizonte límite divide arriba y abajo en continuidad. Se agrega aliento cansado y parturiento caballo y viajero. Sostienen. Son conducidos mientras sostienen. No se detienen, avanzan, sostienen, conducen. Silencio. La gravedad se ha vuelvo más grave y a desplegado dimesionalidad. Vientos introspeccionan gravedad y sonido se vuelve cada vez más orgánico, partícula pura, onda pura. Ha depurado misterio. vientos dibujan burbujas densas a punto de explotar, hamacan. Agudos contrastan, se esfuman. Silencio.

martes, 2 de octubre de 2007

underneath it all

Es la noche de los martes. Acabo de cenar ravioles con mis hermanas. Ahora me estoy tomando un fernet frío con hielo y estoy escuchando a No Doubt. Me estoy reencontrando con música más alegre, que eleva el espíritu. Los martes por las noches, siguen siendo lugar para Antigimnasia. Algo mencioné de esta disciplina, allá por Mayo. Y cómo han cambiado las cosas desde entonces! En algún sentido para mejor, en casi todos los sentidos, excepto por el laboral. Pero creo que inclusive para este cambio, será aún mejor. Tal vez deba animarme a promover mi propio laburo.

en ojos piantaos


Lo que escribí en la última entrada, lo escribí hoy, pero había quedado del sábado en edición pospuesta. Lo que escribí hoy, antes, correspondía entonces a un sentimiento de lunes, que no tiene nada que ver con un sentimiento de fin de semana disfrutado, luego de haber cursado, rendido, atendido, corrido, etc. Un descanso merecido, en el cual no descansé, más que nada estuve de un lado para el otro y acompañada casi todo el tiempo. Por eso a veces también está bueno, parar un poco. Sentarse un rato. Respirar un toque. Aunque a veces implique conectar con realidades que no están tan copadas. (Si mi léxico se hace el canchero, peguenlé un zopapo, y volverá a la normalidad)
Una realidad es la incomodidad del desafío. Entre ayer y hoy, siento que no sólo hay energía positiva, sino que por momentos un poco de impaciencia y agresión. Tal vez se lo pueda llamar enojo. En el ojo del otro. Ira, ataques de, si está saliendo todo el pus. Lo lamento por la gente que me rodea, pero a veces me sale un perro que ladra y me asusto de verme a mi misma en ese estado de descarga feroz por instantes. Supongo que aquí viene la respuesta del contenedor. El contenedor es un artefacto que se utiliza para contener la redundancia. Nadie sabe el orígen exacto de su colocación, pero sucedió en algún momento mítico sin memoria en sueños. Tampoco se sabe con exactitud quienes fueron los colocadores, tal vez se trataba de un molde y de una pieza atraídas magnéticamente. Se colocaría ficha pero no se recordaría orígen, pues ficha estaría pensada para ser olvidada. Capaz que una modalidad de distracción, es una vocación por evasión de escollo. Pero escollo es un adjetivo puro, sin artículos a su disposición. Cualidad pura. Imágen pura inabarcable, más parecida a sentimiento que a objeto. Objeto toma cualidades múltiples, sus disfraces, más sigue siendo objeto. Sentimiento es difuso, como aquella profusión del océano. Aquella profusión del océano también es energía pura en fusión de totalidad. En función de ninguna ecuación, más no es lógica, ordenada, racional, y por momentos rígida y corregible estructura. Luego cualidad desborda e improvisa sobre la marcha el camino. Aquí brilla cualidad. Y para llegar a cualidad no se llega de casualidad aunque por momentos así lo parezca. He allí la chispa de cualidad. Más estructura teme desaparecer y desbordarse de cualidad. Allí coloca miedo del juicio. Juicio divide las aguas en dos. Cualidad se resiente, más no se destruye. Pero sentimiento de enojo (en este caso percibido) es la reacción a prejuicio. Palabras marcan compaz, compaz inconsciente por momentos caja de pandora. NO me cierra, miedo a ser, no me cierra.
Miedo intenta encajonar a sentimiento, lo pinta de oscuridad. Sólo máscara, pero habíamos dicho máscara es a objeto. 'Sentimiento también es máscara? Perdida en la oscuridad, retorna luz a lugar. Lugar por momentos incómodo de habitar, más luz busca la oscuridad. A solas con objeto, con sentimiento, con estructura, con máscara, con ser. Es a solas la búsqueda. Luz distingue formas en caverna hermes. Más hermético sentido a solas ve luz. Luz es a la vez onda y partícula. Luz no se ve sin oscuridad. Luz puede enceguecer.

Entonces aquel sábado, luego de haber visitado amigos y tomado fernet, y comido asado, y reído mucho aquel viernes, al compaz de dale alegría alegría a mi corazón por pasaje de adoquines y aromas a azahar, aquella noche preciosa. Mientras estaba sentada con los pies descalzos sobre el pasto, tomando mate, mirando a los pájaros alborotados, a las vacas peleando en espejo, mientras en la cocina de la casa antigua sonaba la radio am que contaba la historia de como ese personaje se había vuelto loco. Pues porque una vez despertó y encontrose con la realidad de que le habían robado sus máscaras, aquellas máscaras y aquellos ladrones salió a buscar, y se encontró en la cara de otro la luz, que lo encegueció y le dijo, pues que aquellas máscaras mejor que habían sido robadas y ya no las buscó más, y vino entonces esa música de tango que dice Piantao, piantao piantado, la rueda luna por las calles callao. Balada de un loco, no?. Preciosa creación argentina su creador, más su obra en universal lenguaje piantao. Por que los hay en todas partes supongo. Algunos están enterrados en el Borda, pero yo nunca los ví. Otros tal vez convivan con nosotros. La locura agujerea los poros, y no necesariamente siempre está encerrada. A veces suele salir a pasear por un rato. Pero siempre vuelve a su lugar. Aunque ella sabe que no le pertenece a nadie, porque no se perteneces ni a si misma. Como algunos ángeles.
Entonces, ir y venir, siempre se puede. Y la locura genera rechazo, porque es como la caja de pandora, nunca se sabe que habrá de salir de allí dentro o si es que sale de allí pues se convierte en sorpresa.
Y para finalizar mi lindo fin de semana, Reiki en lo de Marce, por ella misma, charla, mate y pintura, música, sahumerios, reflexiones. Interesante culminación del ciclo. Luego hoy ya comenzó la semana y no puedo relajar tan fácilmente hasta que no la viva de comienzo a fin. Lo mejor sería estar todo el tiempo en relax, pero cuando comienzan las presiones, y sobre todo las presiones inevitables de resolver algunas cosas del orden de los espejos, que ya mencioné. Será tal vez por eso el enojo. Cuando hay presión, hay enojo. Esta vez podrá ser vivido de una manera alternativa? Tal vez, pero antes tengo muchas cosas que hacer. Ja! Adelanta el yo el enojo, cuando no han sucedido las posibilidades, pero algo se tiene que mover para salir de la comodidad plácida obnubilada. Pequeños errores, desfazajes incómodos, son parte de la rutina de hoy.

COME AS YOU ARE - NIRVANA/CAETANO VELOSO
come
as you are
as you were
as I want you to be
as a friend
as a friend
as a known memory
talke your time
hurry up
the choice is your
don´t be late
take a rest
as a friend
as a known memory
memory
come
doused in mud
cept in bleach
as I want you to be
as a trend
as a friend
as a known memory ah
memory
and I swear
that I don´t gave a gun
no, I don´t have a gun
no, I don´t have a gun
Memory ah.