domingo, 14 de septiembre de 2008

"ser así no cuesta nada "

http://www.youtube.com/watch?v=LE3muQc8LEk&feature=related

primaveral otoño

no eres ya lo que quisiste ser.
eres lo que eres, lo que siempre has sido
lo que se ha pasado por el tiempo que has perdido.
un pavo real descolorido,
un perfecto conocido.


Existen distorsiones entre lo que sueña una imagen deseo y lo que efectivamente acontece real. Parte de la materialidad "mente" trasciende la realidad cuerpo y colorea lo que ve. El fantasma es un perfecto fantasma en tanto siga manifestándose como resto de imagen, pero comienza a ser "pesadilla" en tanto manifestación de sonido voz. Las personas más sanas se dice, tienen un rapport certero de su materialidad, por ende menos distorsión de si, de la realidad sensorial en función de la realidad imaginaria. Romper la cúpula del narcicismo -cristal brillante, burbuja de ensueño- significa sacarle un sonido, más que una imagen al ser. Un sonido musical, una vibración color. Una nota en manifestación. Del estruendo ruido del estallido cristal afina su autenticidad, la ajusta a la desaparición de la imaginería. Una nota justa no tiene ecos desafinados. Vibra certera en si misma.
Supongo que "conocerse" anda caminos contiguos a la musicalidad. De lo recorrido puedo situar momentos de estallar los cristales un poco cada vez, ansiando el estallido final que contiene la nada para liberarla de si. Pero como no me puedo pensar en nada, porque algo sigue hablando desde mi espíritu, un ente que reconoce su respiración y su latir, puedo describirlo como la talladura de una piedra esencia. Se va templando al espíritu pretencioso. Se moldea la materia pero sus aristas son cada vez más visibles. Algunas se liman más suavemente y vendrán a formar parte del paisaje mismo, bien pueden ser mesetas o agudos picos de montañas en erosión. Otras serán insalvables, se incluirán en el paisaje como grietas de la tierra madre por donde encausarán ríos del alma. Entonces de la piedra esencia, la escultura animada. De la vibración ruido, la vibración sonido.
Las imaginerías tienen esa función de auricular en estéreo. Algo que resuena dentro de algo que suena. Imaginario resto que desafina, ilusión que distorsiona. El dolor que duele en serio por lo que surge luego su aceptación sin comentarios en off, nos conecta con la caída en realidad de quienes somos y qué hicimos para ponernos en esa situación. Recuerden uds. que las primeras caídas son las que más duelen, luego ya conocemos y ese saber arma un amortiguador de caídas. Se templa el espíritu. Se disciplina a la bestia.
Deseamos en función de la realidad, aproximados a lo posible del potencial humano. Y por sobre todo, nos hacemos cargo -sin repartir culpas proyecciones- y asumiremos más rápidamente nuestra participación en aquello que construímos día a día. Se entiende entonces porqué se dice que las ilusiones generan sufrimiento. Y se entiende que es fundamental "amar la realidad que construyes"

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